Injusto. Como lo hubiese sido si ganábamos nosotros. Son esos partidos que a nadie le gusta perder, pero a pesar de haberlo perdido, te quedas tranquilo por lo que se jugó, lo que se tocó y sobre todo por los que se marcó. Faltó un poco (bastante) de los delanteros que no aportaron nada.
Un partido muy parejo, donde podemos destacar una atajada fantástica mano a mano del Pizzero, el gran despliegue del Pipi, los defensores bien parados, un tiro en el travesaño de Pablo y hubo momentos donde se tocaba y se cuidaba la pelota como si nosotros fuéramos la Católica. Le aguantamos 75 minutos y el gol llega tras un saque largo del arquero que lo sobra a Carrizo (falta de cálculo), el delantero recibe y pone un centro perfecto donde Franco y el Turco (uno x el otro) nada pudieron hacer y de cabeza nos convierten.
Quiero rescatar la actuación del árbitro. Hacía mucho que no nos tocaba un árbitro que dirigiera de igual a igual, donde no se dejó manejar el partido por el banco de suplentes o el Moni que por lo general sacan ventaja de su experiencia en primera.
No hay comentarios:
Publicar un comentario